La renuncia de Halevi cumple su promesa de asumir la responsabilidad por los atentados del 7 de octubre • El comandante del Comando Sur, Yaron Finkleman, sigue su ejemplo

El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, el teniente general Herzi Halevi, dijo que dimitirá el 6 de marzo, según escribió el martes al primer ministro Benjamin Netanyahu y al ministro de Defensa Israel Katz.
Dimitirá después de dos años y dos meses en el cargo, unos 10 meses antes del mandato estándar de tres años.
Halevi dijo que dimite en cumplimiento de su promesa desde octubre de 2023 de que asumiría la responsabilidad por el fracaso del 7 de octubre.
En un discurso pronunciado más tarde el martes, el jefe del Estado Mayor pidió la creación de una comisión de investigación estatal para abarcar todos los asuntos relacionados con la seguridad nacional que están más allá de la autoridad y el control de las Fuerzas de Defensa de Israel.
Sin dar explicaciones, también aludió a la posibilidad de que otras entidades pudieran investigar los asuntos más amplios relacionados con el fracaso, incluido el gobierno y las decisiones del propio Netanyahu.
A pesar de los fracasos, Halevi destacó sus recientes éxitos y los del ejército, incluso contra Hezbolá en el Líbano, contra el régimen de Asad en Siria, contra Irán y en la derrota de los 24 batallones de Hamás, así como en obligar a Hamás a aceptar el acuerdo de intercambio de rehenes que comenzó esta semana.
Más específicamente, dijo que las FDI habían matado a casi 20.000 miembros de las fuerzas de Hamás y la Jihad Islámica Palestina en Gaza, alrededor de 4.000 miembros de las fuerzas de Hezbolá en el Líbano y 794 terroristas en Cisjordania.
Además, el jefe de las FDI dijo que durante su mandato, el ejército logró mantener el terrorismo en Cisjordania a niveles suficientemente bajos, lo que le permitió concentrar la mayor parte de sus esfuerzos en los dos frentes principales con Hamás y Hezbolá.
Los objetivos de la guerra siguen abiertos
El jefe del Estado Mayor reconoció que los objetivos de la guerra del país siguen abiertos, incluida la eliminación del control político de Hamás sobre Gaza y la devolución de los 94 rehenes restantes como parte de la restauración de la disuasión israelí frente a sus adversarios.
Halevi dijo que pasaría las próximas seis semanas asegurándose de emitir el informe del ejército sobre los fracasos del 7 de octubre, así como de gestionar el alto el fuego actual y la posible transición a un alto el fuego permanente.
Además, dijo que quería transferir la gestión de las FDI mientras la situación de seguridad ha situado al ejército en la situación más fuerte y estable en la que se ha encontrado desde el 7 de octubre de 2023.
A los pocos minutos del anuncio, el jefe del Comando Sur, el mayor general Yaron Finkelman, también anunció su dimisión.
A diferencia del jefe de las FDI, no dio una fecha, pero sugirió que la fecha podría ser elegida por Halevi o su sucesor. Finkelman sólo había sido jefe del Comando Sur durante unos meses antes del 7 de octubre, por lo que su dimisión pondría fin a su mandato mucho antes incluso que la del jefe del Estado Mayor.
Según todos los observadores, Katz ha estado intentando, bajo las órdenes de Netanyahu, expulsar al jefe de las FDI desde que asumió el Ministerio de Defensa de manos de Yoav Gallant el 6 de noviembre.
De hecho, Katz ha congelado sus nombramientos dentro de las FDI durante meses consecutivos, lo que encadena su poder y debilita su autoridad dentro del ejército.
La mayoría de los analistas dicen que Netanyahu quiere culpar a Halevi de la mayor parte del fracaso del 7 de octubre, ya que las FDI publican su investigación sobre ese fracaso, al tiempo que evitan cualquier investigación estatal sobre sus propias acciones como arquitecto de la contención de Hamás y de facilitarle la recepción de fondos de Qatar mientras fue primer ministro durante la mayor parte del período 2009-2023.
Fuentes confirmaron una vez más el martes por la noche que Netanyahu no tiene intención de dimitir como los otros protagonistas principales de los fracasos de seguridad del 7 de octubre.
Una de las grandes dudas era si el jefe de las FDI convocaría una comisión estatal de investigación, como hizo su exjefe de inteligencia, Aharon Haliva, cuando dimitió en agosto de 2024.
A pesar de sus intentos relativamente no disimulados de derrocarlo, tanto Netanyahu como Katz elogiaron al jefe de las FDI por su decisión de dimitir y por sus décadas de servicio al ejército.
El líder del Partido de Unidad Nacional, exjefe de las FDI, excomandante y designado por Halevi, Benny Gantz, elogió al jefe del Estado Mayor por asumir la responsabilidad del 7 de octubre y pidió a Netanyahu que hiciera lo mismo, diciendo que su partido volvería a proponer el miércoles un proyecto de ley para una comisión estatal de investigación.
Aparte de Netanyahu, muchos oficiales de las FDI dijeron que creían que el jefe del Estado Mayor permaneció en el cargo demasiado tiempo a la luz de los fracasos del 7 de octubre, mientras que otros lo apoyaron para garantizar que se llevara a cabo un acuerdo sobre los rehenes a pesar de la oposición percibida de Netanyahu a tal acuerdo.
Candidatos para el puesto
El principal candidato para reemplazar a Halevi es Eyal Zamir, quien actualmente se desempeña como director general del Ministerio de Defensa, es un ex subjefe de las Fuerzas de Defensa de Israel y quedó en segundo lugar durante la última carrera para jefe de Estado Mayor.
Zamir también era el candidato favorito de Netanyahu en ese momento, aunque Yair Lapid era el primer ministro en ese momento, y el entonces ministro de Defensa Gantz hizo el llamado para nombrar al actual jefe de Estado Mayor.
Otro candidato principal es el subjefe de Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel saliente, el mayor general Amir Baram, quien no se llevaba bien con Halevi y era más cercano al predecesor de Halevi, Aviv Kohavi.
Otro posible candidato es el jefe del Comando Norte, el mayor general Uri Gordon, quien ha sido visto como muy exitoso pero también ha sido mayor general por menos tiempo que Zamir y Baram.
Katz no perdió tiempo en enviar un mensaje de que comenzaría de inmediato a examinar y entrevistar a los candidatos para el cargo de jefe de Estado Mayor. Parece que Katz seleccionará a un nuevo jefe, probablemente Zamir, la semana que viene. Esto es mucho más rápido que el proceso estándar, que a veces dura varios meses.
No estaba claro cuál sería el impacto de la decisión de Halevi sobre si el portavoz de las FDI, el almirante Daniel Hagari, permanecería en su puesto, ya que está estrechamente asociado con él.
Hagari ha indicado que permanecerá en su puesto si lo solicita el próximo jefe del Estado Mayor.
A pesar de la renuncia de Halevi y las renuncias o despidos anteriores de todos los funcionarios clave de inteligencia de las FDI involucrados en los fracasos del 7 de octubre, así como el despido de Gallant y un alto funcionario del Shin Bet (Agencia de Seguridad de Israel) relacionado con los fracasos, no ha habido ninguna pista sobre cuándo renunciará el director del Shin Bet, Ronen Bar.
El mandato de Bar como jefe del Shin Bet, de cinco años, es más largo que el de un jefe de las FDI. Incluso los jefes de Estado Mayor que llevan mucho tiempo en el cargo normalmente solo obtienen una extensión de un año que lleva a un mandato de cuatro años.
Esto significa que mientras que Halevi solo renuncia a 10 meses de su mandato, si Bar renunciara ahora, estaría renunciando a 1 año y 10 meses de su mandato, que de lo contrario duraría hasta octubre de 2026.
Además, el Shin Bet, a diferencia de las Fuerzas de Defensa de Israel, ha sido un libro cerrado en lo que respecta a sus fracasos del 7 de octubre.
Si bien el Shin Bet suele ser más reservado que las Fuerzas de Defensa de Israel, comparte regularmente materiales públicos redactados, y ha habido muchas preguntas sobre por qué no ha sido más transparente.
Un argumento ha sido que Bar cree que Netanyahu y el ex ministro de seguridad nacional Itamar Ben-Gvir dañarían la aplicación de la ley y la contención de la violencia extremista judía si dimitiera antes de tiempo.
Aun así, se espera que Bar renuncie en algún momento antes del final de su mandato para demostrar que también asume la responsabilidad por los atentados del 7 de octubre.
Se espera que otros altos funcionarios de las Fuerzas de Defensa de Israel, incluido el jefe de la fuerza aérea Tomer Bar y el jefe de la marina David Saar Salama, también renuncien.
Salama ya ha sido jefe de la marina durante más de tres años, desde septiembre de 2021. Bar cumplirá tres años en abril.
No se espera que el director del Mossad, David Barnea, renuncie antes de que finalice su mandato en junio de 2026 porque su agencia no era responsable de Gaza como las FDI y el Shin Bet y porque tiene mejores relaciones con Netanyahu que los otros jefes.
Fuente: JPost- Traducido por UnidosxIsrael
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