El ejército ruso anunció que estableció puestos de control en el acceso a ese territorio controlado por Israel.
Rusia finalmente retiró las fuerzas de Irán de la frontera y estableció puestos de control en el acceso a los Altos del Golán, territorio sirio controlado por Israel, informó este jueves el vicejefe del Estado Mayor ruso, Serguei Rudskoi. El anuncio llevó algo de tranquilidad a Israel, que temían por la seguridad en la frontera.
«En el transcurso del último mes se ha llevado a cabo una operación única en su género para aniquilar a los grupos armados ilegales en las provincias de Deraa, Al Quneitra y Al Sueida, en el sureste del país», dijo Rudskoi en rueda de prensa en Moscú.
El régimen del presidente sirio Bashar al Assad ha recuperado el control sobre todo el territorio de las tres provincias, porque de hecho la oposición moderada fue forzada a rendir las zonas que controlaba, algo que no oculta Moscú. Las tropas rusas desplegadas en Siria «llevaron a cabo acciones en las zonas controladas por la oposición moderada para pacificar a los grupos armados ilegales y restablecer el control gubernamental», explicó Rudskoi.
Según el general ruso, más de 4.300 milicianos de la oposición moderada fueron evacuados a la provincia de Idleb, fronteriza con Turquía, en la que están desplegadas las tropas turcas que garantizan su seguridad.
Tampoco oculta Rusia que el próximo objetivo es recuperar Idleb, aunque deberá negociar con Ankara para que retire a sus soldados de la provincia.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirmó este jueves en Singapur que ahora toca «rematar a los terroristas que aún quedan, en particular en Idleb», una de las cuatro zonas de distensión creadas por Rusia, Irán y Turquía durante sus negociaciones en el llamado «proceso de Astaná».
El miércoles, el enviado especial del gobierno ruso a Siria, Alexander Lavrentyev, dijo que las fuerzas iraníes habían retirado su armamento pesado, que podría ser una amenaza para Israel, hasta una distancia de 85 kilómetros de los Altos del Golán.
Quneitra se encuentra directamente en la frontera con los Altos del Golán. Israel celebró la toma de control de la zona por parte del gobierno sirio, pero teme que con ello lleguen hasta sus fronteras unidades de las milicias de Hezbollah, controladas por su enemiga Irán, que también apoya al presidente sirio Bashar Al Assad.
Rusia considera a Irán una aliada en el apoyo a Al Assad, pero a la vez intenta mantener apartadas a sus milicias de la frontera israelí.
Ante los avances de las fuerzas del gobierno sirio, Israel considera que el país vecino está recuperando el nivel de estabilidad previo a la guerra civil que estalló en 2011, según el ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman.
«Respecto a todo lo que está pasando al otro lado, en Siria: desde nuestro punto de vista la situación está volviendo al estado en el que se encontraba antes de la guerra civil», dijo Lieberman a la prensa este jueves.
Lieberman aseguró que Israel seguirá sin inmiscuirse en los asuntos internos sirios siempre que se cumplan tres puntos. «Primero, una estricta adhesión al acuerdo de desconcentración de tropas de 1974. Segundo, que Siria no sirva de puesto avanzado para Irán. Y tercero, que Siria no sirva de lugar de tránsito para el contrabando de armas a Hizbolá desde Líbano», dijo el ministro.
El Ejército sirio, en sus sucesivas ofensivas para recuperar territorios controlados por la oposición -en Aleppo, Guta Oriental, Deir al Zur y, en las últimas semanas, en el sur del país- ha permitido que milicianos y civiles contrarios al Gobierno fueran evacuados desde esas zonas a Idleb.
Y ahora que los sirios han reconquistado prácticamente todo el país, con la salvedad de los territorios donde están desplegadas tropas de Estados Unidos, Damasco y Moscú, ya preparan el terreno para librar la que podría ser la última batalla de la guerra.
Ataque de Israel a supuestos terroristas
También en esa zona, la Fuerza Aérea israelí mató a siete hombres armados, informó este jueves un portavoz del Ejército de Israel.
Los hombres se dirigieron la noche del miércoles en formación de combate hacia la frontera de Siria con Israel, explicó el vocero Jonathan Cornicus. «Estaba claro que se trataba de terroristas», agregó, y que no eran personas que estuviesen huyendo sino «en una misión de ataque». Se cree que se trababa de miembros de un grupo escindido de la desarticulada milicia terrorista ISIS.
El ataque tuvo lugar en la zona fronteriza entre los Altos del Golán, Siria y Jordania. Los hombres armados estaban a pocos cientos de metros de la línea fronteriza con Israel, entre la denominada «línea Alpha» -el límite occidental de una zona tapón- y la valla fronteriza.
Sus movimientos fueron seguidos durante un tiempo y después las Fuerzas Aéreas dispararon. En ningún momento hubo civiles israelíes en peligro, señaló el portavoz.
Tras el ataque en la zona fueron encontrados los cadáveres de siete personas, cinturones explosivos, armas de asalto y granadas de mano, dijo Cornicus.
Fuente: Clarin.ar