Imágenes surrealistas nos obligan a todos a orar para que Dios regrese la vida a Su Ciudad Santa
Quienes conocen nuestra ciudad natal de Jerusalén saben que es una ciudad llena de gente y bulliciosa. Uno de los aspectos más surrealistas de la crisis del coronavirus es ver la Ciudad Santa casi vacía. No hay atascos, ni peregrinos, ni judíos, musulmanes o cristianos que llenen los lugares sagrados. Solo un extraño silencio.
Únete a nosotros mientras oramos todos los días por la mano de Dios para detener esta plaga moderna y devolver la vida, en primer lugar a la ciudad donde Él eligió poner SU nombre.
«Elegí Jerusalén para que mi nombre esté allí …» (2 Crónicas 6: 6)
¡Ora por la paz de Jerusalén! ¡Que estén seguros quienes te aman! ¡La paz esté dentro de tus muros y la seguridad dentro de tus torres! (Salmo 122: 7)
“Cuando cierro los cielos para que no llueva, o ordeno a la langosta que devore la tierra, o envíe pestilencia entre mi pueblo, si mi pueblo que es llamado por mi nombre se humilla, y reza y busca mi rostro y se vuelve de sus malos caminos, entonces oiré del cielo y perdonaré sus pecados y sanaré su tierra «. (2 Crónicas 7: 13-14)
Fuente: IsraelToday- Traducido por UnidosxIsrael
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