El llamado «gabinete del coronavirus» retrasa cualquier toma de decisiones a pesar de reunirse durante siete horas. Netanyahu elimina el toque de queda propuesto en todo el país, pero sugiere que las tiendas minoristas cierren por la noche para evitar un aumento en la tasa de infección.
A pesar de la convocatoria durante siete horas, una reunión del llamado «gabinete del coronavirus» terminó sin decisiones concretas el domingo.
El gabinete concluyó que las escuelas deberían permanecer abiertas y que un toque de queda propuesto a nivel nacional resultaría ineficaz ya que sería difícil de hacer cumplir.
Además, el organismo llamó a examinar la posibilidad de imponer toques de queda nocturnos locales en ciudades «naranja» y «rojas», de acuerdo con el método de semáforo del país para determinar las restricciones de salud pública para las autoridades locales en función del número de nuevos casos de coronavirus y el porcentaje de resultados positivos de la prueba. También pidió que las multas por violaciones de las restricciones a las reuniones masivas se aumenten a 30.000 shekels ($ 8.910).
Sin embargo, el primer ministro Benjamin Netanyahu recomendó un toque de queda a nivel nacional en las operaciones minoristas.
«Cuanto más abramos, más seguirán aumentando las tasas de morbilidad», dijo, según un informe del sitio de noticias Ynet.
Si bien muchos de los ministros pidieron que se eliminen las restricciones a la educación y el comercio en persona, los funcionarios del Ministerio de Salud y el asesor de seguridad nacional Meir Ben-Shabbat advirtieron contra tal medida, diciendo que resultaría riesgoso dado el aumento de la infección. Hicieron hincapié en que el gobierno se había comprometido con un proceso más lento y cauteloso desde el segundo bloqueo de Israel después de que se culpó a una salida apresurada del primer bloqueo por un aumento en las infecciones durante el verano. El ministro de Salud, Yuli Edelstein, dijo que apresurarse a abrir la economía en última instancia dañaría el mercado al llevar al país a un tercer bloqueo.
El ministro del Interior, Aryeh Deri, respondió que era inevitable un tercer cierre. Argumentó que «a la luz de que hay un calendario para una vacuna, debemos prepararnos para un tercer cierre en la línea y abrir el sistema educativo y el comercio. No veo ninguna posibilidad en nuestra situación actual, si no recuperamos las restricciones, de estar por debajo de un 0,8 [% de tasa de infección] y 500 [nuevas] infecciones, que es el índice que establecimos «.
Desde el inicio del brote, 324,293 israelíes han contraído el coronavirus. Actualmente hay 7,918 casos activos en el país, 314 de los cuales son graves. De los que están en estado grave, 133 están conectados a ventiladores. Han muerto un total de 2.732 personas.
Fuente: IsraelHayom- Traducido por UnidosxIsrael
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