Primer ministro Benjamin Netanyahu: «Estamos en estado de emergencia».
Una vez más, el país está completamente bloqueado en medio de un aumento en los casos de nuevos coronavirus.
El gobierno aprobó el martes por la noche, un cierre que comenzará el jueves a la medianoche e incluirá el cierre de todo el sistema educativo, excepto la educación especial.
Cuando el gobierno se reunió el martes por la tarde para discutir nuevas restricciones, ya había un consenso casi total entre los ministros. Eso es porque el Ministerio de Salud reportó 8.368 nuevos casos el día anterior, 828 personas en estado grave, entre ellas más de 200 que fueron intubadas. De los examinados para el virus, el 7,4% dio positivo.
Además, el comisionado del coronavirus, Nachman Ash, informó que ya se habían descubierto en Israel unos 30 casos de la mutación británica y que esas personas infectaron a otras 189 personas, un promedio de seis personas por cada persona infectada.
«Estamos en medio de una pandemia global que se está extendiendo a toda velocidad con la mutación británica», dijo el primer ministro Benjamin Netanyahu durante la reunión. «Ha llegado a Israel y se está cobrando muchas vidas».
Dijo que el país necesitaba «imponer un cierre total de inmediato» y que «cada hora que nos demoramos, la enfermedad se propaga aún más rápido y está cobrando un alto precio».
Anteriormente, Netanyahu dijo: “Los hospitales nos advierten que estamos entrando en la ola más peligrosa desde el estallido de la pandemia. El Ministerio de Salud y los expertos nos advierten que estamos en un estado de emergencia y que si no actuamos de inmediato, perderemos a muchos cientos de israelíes que morirán, e incluso más ”.
El cierre probablemente signifique que todas las escuelas estarán cerradas, excepto las de educación especial. Las reuniones se reducirán de 10 a cinco personas adentro y de 20 a 10 personas afuera. Todos los negocios estarán cerrados, excepto aquellos que venden productos esenciales u ofrecen servicios esenciales.
Los detalles finales del cierre deben presentarse ante el gobierno para su aprobación el miércoles, explicó un mensaje de la Oficina del Primer Ministro.
LOS MINISTROS de salud y finanzas determinarán una lista de lo que se considere esencial.
Los viajes al extranjero solo se permitirán para fines esenciales. Las personas que compraron boletos antes del bloqueo aún podrán salir del país, pero no se aceptarán boletos nuevos.
Asimismo, se mantendrán las restricciones ya vigentes, incluido el hecho de que nadie podrá viajar más de 1.000 m. desde casa. No habrá tiendas abiertas y los restaurantes se limitarán a la entrega únicamente. No se permitirá que las personas se reúnan en sus casas.
Se seguirán permitiendo las actividades deportivas individuales.
El primer ministro, junto con los ministros de Defensa y Finanzas, decidirá una política para permitir que los trabajadores palestinos de la industria de la construcción ingresen al país, según la PMO. Los ministros entendieron que no había más remedio que aprobar un cierre, después de escuchar de una variedad de expertos y funcionarios de salud que muchas vidas estaban en juego.
Según la Dra. Sharon Alroy-Preis, jefa de Servicios de Salud Pública, la tasa de reproducción (R) es de 1,27 y es superior a 1,0 en el 95% de las ciudades de Israel. Dijo que el 65% del país es «rojo» y que «incluso si cerramos hoy, las cifras seguirán aumentando».
La tasa de reproducción es el número de personas que infecta una persona enferma.
Alroy-Preis dijo que las cifras reales están superando incluso las peores predicciones hechas por el Ministerio de Salud.
Los profesionales médicos presentes en la reunión también expresaron una imagen igualmente sombría, según filtraciones de la reunión.
Según Ash, un promedio de 30 personas mueren al día por el virus.
«Es mejor tomar la decisión difícil ahora y si hay un cambio dramático, haremos un cambio», dijo Ran Balicer, director de innovación de Clalit Health Services y presidente del Panel Asesor Nacional de Expertos del Gobierno sobre COVID- 19 en la reunión. Dijo que no sería práctico en esta etapa implementar un modelo diferenciado con la mayor parte del país marcado en naranja o rojo.
“Cuando decimos cierre, nos referimos al cierre más dramático que Israel puede manejar”, enfatizó el profesor Eran Segal del Instituto de Ciencia Weizmann. «Sin medidas drásticas, no hay posibilidad de detener toda esta enfermedad».
«Ya estamos en la cima de pacientes graves hoy y el sistema hospitalario tendrá dificultades para dar tratamiento tanto a los pacientes con coronavirus como a otros pacientes al mismo tiempo», dijo el Dr. Zeev Feldman, presidente de la Organización de Médicos Empleados del Estado de Israel y vicepresidente de la Asociación Médica de Israel. “Mi grito surge de los pasillos de los hospitales inundados de pacientes [y] equipos médicos estirados hasta el límite”.
“Amigos, necesitan entender bien cuál es el precio de no hacer nada hoy: cientos de muertos, miles en estado grave y decenas de miles enfermos”, dijo Edelstein anteriormente en una conferencia de prensa.
En la reunión señaló que por primera vez los jefes de las autoridades locales quieren cerrar. Dijo que los mismos alcaldes y jefes de comercio e industria que solían atacarlo y sus políticas ahora exigen el cierre del país.
Incluso los ministros de finanzas y educación, que apenas unos días antes se oponían a tales medidas, votaron a favor del cierre.
“Todo el mundo muestra que la situación hoy es peor que nunca, cuando ves la luz al final del túnel, las vacunas son una gran cosa, pero dificulta motivar el cierre y la aplicación de la ley”, dijo el ministro de Finanzas, Israel Katz.
Respecto a mantener abiertos los jardines de infancia, dijo que “el Ministerio de Hacienda no será más difícil que el Ministerio de Educación”.
Katz se refería a una declaración realizada por el ministro de Educación, Yoav Gallant, quien dijo que “el sistema educativo es el sistema más grande del Estado de Israel y abarca casi el 30% de los ciudadanos del Estado de Israel, la mayoría de ellos jóvenes.
Hasta el momento, se han vacunado 1,5 millones de personas. Los fondos de salud están ahora enfocados en preparar la finalización de la primera fase de la campaña de vacunación del país y proporcionar al personal médico, ancianos y personas con condiciones preexistentes su segunda dosis de la vacuna en las próximas semanas.
Se espera que para que Israel alcance la inmunidad colectiva, al menos cinco millones de israelíes deberán haber sido vacunados o haber sido infectados con coronavirus y recuperados, dijo el director general del Ministerio de Salud, Chezy Levy, en la reunión. Calculó que 1,8 millones de israelíes habrían recibido ambas dosis de la vacuna a finales de enero.
Fuente: JPost- Traducido por UnidosxIsrael
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