El primer ministro Benjamin Netanyahu parece estar al alcance de asegurar los 61 mandatos necesarios para formar un gobierno, pero aún depende del líder de Yamina, Naftali Bennett. En un cambio dramático, Ra’am, el partido árabe israelí, cruza el umbral electoral para ganar cinco escaños.
Tras una dramática noche de martes y después de que se contabilizara el 87% de los votos hasta el miércoles por la mañana, el primer ministro Benjamin Netanyahu y su partido Likud parecen estar cerca de la victoria, aunque su destino aún depende del líder de Yamina, Naftali Bennett.
El bloque de derecha de partidarios de Netanyahu tiene actualmente 52 mandatos; el bloque de centro-izquierda tiene 56 escaños, pero los siete escaños de Yamina, y ahora los cinco escaños de Ra’am, podrían ir a cualquiera de los dos bloques para darle la mayoría que necesita.
Poco después de que se publicaran las encuestas a boca de urna, Bennett dijo: «Solo haré lo que sea bueno para el Estado de Israel». No dio más detalles.
La participación de los votantes el martes fue particularmente baja, solo el 66,9%, lo que marca la participación más baja en las últimas cuatro elecciones.
Los resultados después del recuento del 89% de los votos el miércoles por la mañana fueron los siguientes:
Se espera que contar los votos sea mucho más desafiante en esta elección, debido a la gran cantidad de sobres dobles utilizados por las papeletas de voto en ausencia debido a la pandemia de coronavirus.
Estos votos incluyen a unos 600.000 soldados de las FDI, policías, presos y guardias, representantes diplomáticos en el extranjero y personas que se encuentran aisladas debido al virus. El Comité Central de Elecciones ha empleado unos 6.500 contadores de votos, que tienen hasta el viernes por la noche, antes del comienzo del Shabat, para completar su tarea.
Los resultados ponen a ambos bloques al alcance de formar una coalición, siempre que Yamina se una a uno de ellos. Sin embargo, como Bennett ha prometido no unirse a un gobierno liderado por Netanyahu o por el jefe de Yesh Atid, Yair Lapid, no está claro hacia dónde se dirige el partido nacional-religioso.
Fuente: IsraelHayom- Traducido por UnidosxIsrael
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