La legisladora estadounidense Sheila Jackson Lee nominó por tercera vez para el premio Nobel de la Paz al filántropo judío Yank Barry.
Porque “encabezó sin ayuda la inédita misión de rescatar a más de 60 personas de las deplorables condiciones de los campos de refugiados en Bulgaria” que escaparon de la guerra civil en Siria, explicó ayer, domingo, en un comunicado.
Éste “continúa apoyando a las familias rescatadas proveyéndoles una ‘casa segura’ donde los niños y sus familias reciben un lugar desde el cual llamar a casa, comida, atención médica, empleo, asistencia jurídica, educación”, etc., agregó.
Barry “también ha sido y continúa siendo fundamental para mantener la paz entre funcionarios del gobierno búlgaro y los grupos de refugiados por la crisis siria” y “ha cruzado límites religiosos y económicos por las víctimas indefensas de la guerra siria, dándoles una nueva vida a musulmanes y cristianos siendo judío”, prosiguió el texto.
“Su Fundación Campeones de la Aldea Global y su viejo amigo y socio (el ex campeón mundial de boxeo) Muhammad Alí han alimentado con éxito a casi mil millones (de personas) documentadas, todo con fondos privados del señor Barry”, finalizó.
“Crecí sabiendo que Bulgaria salvó a dos (miembros) de mi familia” durante la Shoá, de modo que ese país está “muy cerca de mi corazón”, contó el mes pasado al diario israelí The Jerusalem Post el filántropo, quien a modo de retribución quiere convertir casas en pueblos abandonados en viviendas permanentes para sirios y ayudar a “entre 300 y 400 familias más” en los próximos tres o cuatro meses.
Fuente: ItonGadol