Amos Hochstein tiene previsto reunirse con Netanyahu, Gallant y otros funcionarios antes de viajar al Líbano; Los funcionarios evalúan que la desescalada en el frente norte depende del alto el fuego en Gaza
El enviado especial de la Casa Blanca para Oriente Medio, Amos Hochstein, llegará a Israel el lunes por la mañana para reunirse con funcionarios israelíes en un intento por aliviar las tensiones con Hezbola en la frontera norte.
Tiene previsto reunirse con el primer ministro Benjamín Netanyahu, el ministro de Defensa Yoav Gallant, el ex miembro del Gabinete de Guerra Benny Gantz, el presidente Isaac Herzog y el líder de la oposición Yair Lapid.
Según las evaluaciones, es poco probable que Hochstein pueda evitar una escalada a pesar de sus próximos esfuerzos. Su influencia sobre Hezbola se considera relativamente limitada. Tanto los funcionarios israelíes como los estadounidenses reconocen que su trabajo depende principalmente de un factor: un alto el fuego en Gaza. Sin avances en ese frente, lo único que puede hacer es preparar un acuerdo para aliviar las tensiones en el área norte y esperar un acuerdo de rehenes para detener la violencia.
Hochstein también está intentando frenar a Israel tras una declaración del portavoz de las FDI a la prensa extranjera, señalando que «la creciente agresión de Hezbolá nos está llevando al borde de lo que podría ser una escalada más amplia». Su objetivo es aprovechar la limitada influencia del Líbano sobre Hezbola. Se espera que Hochstein continúe hacia Beirut, donde se reunirá con el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, el primer ministro Najib Mikati y el ministro de Asuntos Exteriores, Abdallah Bou Habib.
Estas frecuentes visitas están motivadas por importantes preocupaciones estadounidenses sobre una guerra en múltiples frentes. Estados Unidos advierte que incluso una «guerra limitada» podría salirse de control, involucrando potencialmente a Irán y a las milicias chiítas.
Antes de su visita, transcurrió un día inusualmente tranquilo en la frontera norte, que ha sido un punto focal para Israel en los últimos meses. La última alarma sonó a las 03:21 horas entre el sábado y el domingo en Hila, Alta Galilea, sin alertas posteriores ni reivindicaciones de Hezbollah por incidentes. La tranquilidad podría atribuirse a la festividad de Eid al-Adha.
Esta mañana, el portavoz de las FDI informó que un objetivo aéreo sospechoso que cruzaba desde el Líbano fue interceptado con éxito sobre la zona marítima cerca de Acre. No se activó ninguna alerta y no hubo víctimas. Mientras tanto, Israel continuó sus ataques durante las últimas 24 horas, y la falta de acción de Hezbollah ayer no indica un cambio en la postura de la organización, ya que ha prometido continuar luchando mientras Israel ataque en la Franja de Gaza.
Fuente: Ynet- Traducido por UnidosxIsrael
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