El atrevido complot del Mossad con buscapersonas asestó un golpe devastador a Hezbollah, dejando a sus fuerzas destrozadas y enviando ondas de choque a toda la región. La agencia de inteligencia de Israel convirtió el engaño en un arma
Dos ex agentes del Mossad revelaron los detalles detrás de una de las operaciones de contrainteligencia más audaces de Israel, la «Complot de los buscapersonas», en una entrevista con el programa 60 Minutes transmitida el domingo.
El plan, que se ejecutó el 17 de septiembre de 2024, implicaba vender a Hezbolá miles de buscapersonas manipulados y camuflados como dispositivos de alto rendimiento, que el Mossad detonó más tarde, provocando un caos generalizado y graves daños a la organización.
La operación comenzó hace más de una década, cuando el Mossad inicialmente utilizó como arma los walkie-talkies vendidos a Hezbolá. «Un walkie-talkie era un arma como una bala o un misil», dijo «Michael», un ex oficial del Mossad cuya identidad se ocultó durante la entrevista. «Dentro de la batería, hay un dispositivo explosivo… fabricado en Israel».
Los agentes revelaron a 60 Minutes cómo el Mossad creó empresas fantasma para vender estos dispositivos de forma encubierta. «Creamos un mundo imaginario», dijo Michael. «Somos los directores, productores y actores principales; el mundo es nuestro escenario». Explicó que este mundo falso es similar a «El show de Truman», similar a la exitosa película de 1998, protagonizada por Jim Carrey, que vivió desde su nacimiento en un enorme estudio de televisión, lleno de cámaras que transmitían en vivo al mundo.
De los walkie-talkies a los buscapersonas
En 2022, el Mossad cambió su enfoque hacia los buscapersonas, que Hezbollah usaba ampliamente para comunicarse. «Hezbollah todavía usa buscapersonas porque son simples y difíciles de hackear», explicó «Gabriel», otro ex agente del Mossad entrevistado por CBS News. El equipo de Gabriel modificó los buscapersonas disponibles comercialmente, incorporando explosivos pero manteniendo su funcionalidad. Incluso realizaron pruebas exhaustivas para asegurarse de que el dispositivo solo dañara a su usuario y no a los transeúntes.
Para hacer atractivos los voluminosos buscapersonas, el Mossad creó una campaña de marketing con anuncios falsos de YouTube que los promocionaban como «robustos, a prueba de polvo y agua». Gabriel recordó el escepticismo de sus superiores: «Nuestro director nos dijo: ‘No hay posibilidad de que alguien compre un dispositivo tan grande’. Tardamos dos semanas en convencerlo». Finalmente, los buscapersonas fueron vendidos a Hezbollah a través de intermediarios, sin que el grupo terrorista supiera de su origen.
El momento de la activación
El 17 de septiembre de 2024, a las 15:30 horas, el Mossad activó de forma remota los buscapersonas explosivos en todo el Líbano. Según CBS News, quienes portaban los dispositivos recibieron un mensaje cifrado que les indicaba que pulsaran dos botones, lo que desencadenaría la explosión. «Si no pulsaban los botones, explotaría igualmente», dijo Gabriel.
Las explosiones coordinadas provocaron un caos, con hospitales desbordados por miles de combatientes heridos. «La gente tenía miedo de encender sus aparatos de aire acondicionado al día siguiente porque pensaban que podrían explotar», dijo Michael, haciendo hincapié en el coste psicológico.
El día después de las explosiones de los buscapersonas, el Mossad activó los walkie-talkies que habían estado inactivos durante más de una década. Algunos sonaron durante los funerales de los muertos por los buscapersonas. En total, las operaciones hirieron a aproximadamente 3.000 agentes de Hezbolá, mataron a 30 y dejaron a la organización desmoralizada. «El objetivo no era matar», dijo Gabriel a CBS News. «Fue para dejar a Hezbolá con miles de heridos, prueba de nuestra superioridad».
La operación marcó un punto de inflexión en la guerra. El líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, apareció apacible en un discurso pronunciado días después. «Sus soldados vieron a un líder destrozado», afirmó Gabriel. Según 60 Minutes, el búnker de Nasrallah fue bombardeado apenas diez días después, lo que provocó su muerte.
Implicaciones regionales más amplias
Las consecuencias se extendieron más allá del Líbano. CBS News informó de que la operación debilitó la influencia de Irán en la región al paralizar a Hezbolá, su representante más potente. La operación también desestabilizó a Siria, contribuyendo al colapso del régimen de Asad. «Hezbolá está mirando a su alrededor y se da cuenta de que está aislado», dijo Michael, señalando que la operación también tuvo ramificaciones para Gaza.
Aunque la operación reforzó la posición estratégica de Israel, planteó preocupaciones éticas. «¿Qué pasa con la reputación moral de Israel?», preguntó la corresponsal de CBS News, Lesley Stahl. «Hay una priorización», respondió Gabriel. «Primero, defiendes a tu pueblo, luego te preocupas por la reputación».
La operación subrayó la capacidad del Mossad para librar una guerra psicológica. «No podemos volver a utilizar buscapersonas», admitió Gabriel, «pero tendrán que seguir adivinando qué será lo próximo».
El informe de 60 Minutes destacó el impacto duradero de la operación. «Estos combatientes heridos son la prueba viviente de nuestra superioridad», afirmó Gabriel. Para Israel, la operación restableció su sensación de seguridad y envió un mensaje contundente a sus adversarios: «No se metan con nosotros».
Fuente: JPost- Traducido por UnidosxIsrael
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