Cartas enviadas por altos cargos de Hamás revelan sus esfuerzos por conseguir financiación y apoyo para la visión distorsionada de la organización terrorista. Sinwar estimó que terroristas de la frontera jordana también se unirían a la lucha. Haniyeh a Sinwar: Hezbolá apoya una guerra total contra Israel.
Documentos capturados de Hamás, hallados en Gaza, revelan que, tras la Operación Guardián de los Muros en mayo de 2021, la organización terrorista llegó a creer que la destrucción de Israel era un objetivo alcanzable en un futuro próximo. Un nuevo informe del Centro de Inteligencia e Información sobre Terrorismo Meir Amit explica que este cambio también se evidenció en una serie de declaraciones públicas de los líderes de Hamás. Sin embargo, es posible que Israel haya desestimado estas declaraciones como meras alardes, y es probable que, de hecho, se percibieran como tales.
El informe, escrito por el Dr. Uri Rost del Sapir College, evalúa que el duro golpe sufrido por Hamás y otros elementos del eje proiraní en la guerra actual probablemente retrasará el «plan de destrucción» de Israel, reduciéndolo a poco más que una visión. No obstante, el informe advierte que «si Hamás logra recuperarse y recibe el apoyo de Irán, no se puede descartar que vuelva a considerar la idea de ‘destruir a Israel’ como un plan viable en el futuro».
Durante muchos años, el rechazo de Hamás a la existencia de Israel fue un hecho desde la fundación de la organización terrorista. Sin embargo, Hamás era consciente de sus limitaciones. En los últimos años, sin embargo, se ha producido un cambio drástico. Los documentos incautados en Gaza muestran que, durante la última década, Hamás comenzó a formular una estrategia práctica para lograr el fin del Estado de Israel.
Un documento titulado «La Estrategia del Movimiento 2013-2017» (sin fecha exacta) enmarcó la confrontación con Israel principalmente en términos defensivos, abordando posibles ataques israelíes desde el aire y el mar. Abogaba por la «resistencia» mediante un «plan realista», que incluía una intifada en Judea y Samaria, un levantamiento entre los árabes israelíes o ataques contra los judíos en foros internacionales.
A raíz de esto, en una carta fechada el 5 de junio de 2021, Yahya Sinwar, Mohammed Deif y su adjunto, Marwan Issa, escribieron al comandante de la Fuerza Quds, Esmail Qaani, exponiendo su objetivo: «la gran victoria y la erradicación del cáncer», refiriéndose a la eliminación de Israel. Declararon: «Nunca cerraremos los ojos, descansaremos ni permaneceremos en silencio hasta lograr este objetivo sagrado». También solicitaron 500 millones de dólares por un período de dos años.
La carta decía:
«Hermano Comandante Muyahid, para lograr estos grandes objetivos, mediante los cuales transformaremos la faz del universo, con la ayuda de Alá, necesitamos desesperadamente una ayuda financiera de 20 millones de dólares al mes durante dos años, lo que suma un total de 500 millones de dólares. Estamos seguros de que al final de estos dos años, o incluso durante ellos, si Alá quiere, erradicaremos esta entidad distorsionada. Juntos, transformaremos la región y, en última instancia, si Alá quiere, esta era oscura en la historia de nuestra nación».
En otra carta al Líder Supremo iraní, Alí Jamenei, los tres escribieron:
«Esta entidad imaginaria es más débil de lo que la gente cree. Con la ayuda de Alá, su apoyo y el respaldo de nuestra nación, podemos erradicarla y eliminarla lo antes posible. Confiamos en Alá en que estamos cerca de cumplir esta promesa divina, de la cual no hay escapatoria».
Sinwar también envió una carta a Saeed Izadi, jefe de la «Rama Palestina» de la Fuerza Quds, en julio de 2021, declarando que estaban al borde de una «tremenda victoria estratégica» con importantes implicaciones regionales y globales. Escribió que Hamás estaba «a las puertas de la victoria y del cumplimiento de la promesa de Alá».
Dos meses después de la Operación Guardián de los Muros, Sinwar escribió a Izadi:
«Todos han notado el cambio estratégico en la política y la dirección del movimiento bajo el liderazgo de Abu al-Abd [Ismail Haniyeh], que corrigió muchos desequilibrios del pasado. Si bien entendemos que no hemos alcanzado todos nuestros objetivos, no cabe duda de que hemos logrado avances significativos en la dirección deseada. En los próximos años, tenemos una gran oportunidad para completar este camino, consolidando la Alianza de Jerusalén, el eje de la segunda promesa, y reuniendo las herramientas necesarias para lograrlo».
Un año después, en una carta a Ismail Haniyeh, fechada el 19 de junio de 2022, Sinwar describió un escenario estratégico práctico para una guerra en múltiples frentes destinada a la destrucción de Israel. Comenzó afirmando:
«Desde el alto el fuego en la ‘Espada de Jerusalén’ [nombre que Hamás da al Guardián de los Muros], nuestros combatientes yihadistas se han estado preparando a toda velocidad y sin vacilar. Confían en que su preparación para una importante batalla estratégica que transformará la región y sus reglas de combate es casi completa. Están totalmente preparados para lanzarse de inmediato si Dios así lo desea».
Sinwar describió entonces tres escenarios para «unificar los frentes y aprovechar la oportunidad»:
La Gran Campaña Estratégica: Todo el eje proiraní, excepto el propio Irán, atacaría a Israel para acabar con él. Sinwar consideró este objetivo alcanzable si Hezbolá poseía al menos un tercio de sus supuestas capacidades y se unía plenamente a la batalla, junto con las milicias chiítas de Irak y Siria y los hutíes de Yemen. También mencionó elementos adicionales, como terroristas de la frontera jordana y levantamientos en Judea y Samaria, así como entre los árabes israelíes.
Escribió:
«El lema de la campaña debe ser Al-Aqsa y Al-Quds [Jerusalén], ya que este es un detonante nuclear para toda la región. El momento debería coincidir con una festividad judía en la que aumentan las incursiones en Al-Aqsa, los ataques y las oraciones talmúdicas. La Pascua judía, que coincide de alguna manera con el Ramadán, es la más adecuada, pero hay otras festividades judías que podrían desencadenar la explosión».
El Escenario de Batalla Intermedio: Hamás desempeñaría un papel central en un conflicto contra Israel, mientras que Hezbolá participaría parcialmente, junto con fuerzas de otros frentes, incluyendo Judea y Samaria. Sinwar creía que esto causaría un daño significativo a Israel, provocando la emigración de muchos israelíes y conduciendo a la «liberación» de Judea y Samaria y la liberación de prisioneros palestinos. Argumentó que esto sentaría las bases para la eventual destrucción de Israel.
El Escenario Mínimo: Hezbolá no participaría directamente inicialmente. Hamás asumiría la carga principal, con el apoyo del «eje de la resistencia» y terroristas de Jordania y Siria. Según el documento, este era el escenario mínimo que Hamás podía aceptar, requiriendo únicamente la aprobación de Hezbolá y Nasrallah, sin necesidad de la autorización de Jamenei.
Sinwar escribió:
«Este es un escenario necesario en el que concentramos todas nuestras fuerzas en intensificar la situación en Cisjordania y dentro de Israel [más allá de las fronteras de 1948]. Mientras tanto, Hezbolá garantiza que nuestras fuerzas puedan operar con mayor eficiencia desde el Líbano, mientras que elementos de la Fuerza Quds atacan desde Irak y Yemen, y las actividades guerrilleras se intensifican en Siria y Jordania. Hezbolá no participará directamente, pero garantiza la activación de todo lo mencionado, manteniendo el máximo nivel de preparación para escalar a un conflicto de intensidad media o alta según lo dicten los acontecimientos. Este es el escenario mínimo en el que podemos acordar».
En la práctica, Hezbolá y las milicias proiraníes desempeñaron un papel limitado en el conflicto, con Hamás soportando la mayor parte del peso. Las esperanzas de Sinwar de una mayor participación de otros actores no se materializaron.
Posteriormente, en julio de 2022, el entonces jefe de la oficina política de Hamás, Ismail Haniyeh, informó a Sinwar de una reunión con Izadi (Haj Ramadan, jefe de la «Rama Palestina» de la Fuerza Quds) y el secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah. En la reunión, representantes de Hamás presentaron sus escenarios de ataque. Según Haniyeh, Nasrallah expresó su apoyo al primer escenario —la «gran batalla»— e incluso lo describió como un «escenario realista». También se acordó que el asunto se plantearía con Jamenei. Haniyeh le escribió a Sinwar:
«Les presentamos nuestra visión del futuro, explicando que habíamos estudiado el tema en nuestros círculos en Gaza y Cisjordania. En cuanto a nuestros hermanos en el extranjero, actualmente están realizando un análisis general del conflicto con el enemigo, pero aún no están completamente informados sobre los escenarios detallados ni la visión. Presentamos el primer y el segundo escenario de su carta, pero no mencionamos el tercero. Tras un diálogo largo y profundo, la postura de Sayyed Nasrallah fue clara y firme…»
Fuente: IsraelHayom- Traducido por UnidosxIsrael
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