Las ONG de derechos humanos, conocidas por sus frecuentes críticas y acusaciones contra Israel, guardan silencio ante el ataque con misiles iraníes contra el Centro Médico Soroka.
ONG de derechos humanos, como Amnistía Internacional y Human Rights Watch, se han negado a condenar el ataque con misiles de Irán contra el Centro Médico Soroka la semana pasada, según informó el Washington Free Beacon.
Soroka fue alcanzado durante una descarga de misiles disparada desde Irán el jueves, destruyendo el pabellón quirúrgico del hospital de Beer Sheva. 71 personas resultaron heridas en el ataque, aunque no hubo víctimas mortales, ya que el hospital había evacuado a sus pacientes a instalaciones subterráneas poco antes del ataque.
Las autoridades israelíes acusaron a Irán de cometer crímenes de guerra y de atacar deliberadamente el hospital. El presidente Isaac Herzog tuiteó inmediatamente después del ataque: «Un bebé en cuidados intensivos. Una madre junto a su cama. Un médico corriendo entre las camas. Un anciano residente en una residencia de ancianos. Estos fueron algunos de los objetivos de los ataques con misiles de Irán contra civiles israelíes esta mañana». Durante una visita al hospital, Herzog declaró: «¡Esto es un crimen de guerra! En estas imágenes, vemos dos cosas: vemos el rostro del mal y el terror sembrados por los ayatolás en Teherán, y al mismo tiempo vemos la resiliencia y la fuerza de la sociedad israelí, unida en nuestro deseo de que todos los pueblos de esta región vivan en paz».
Cuando Free Beacon contactó a Amnistía Internacional para obtener comentarios sobre el ataque a Soroka, la ONG respondió que no haría comentarios en ese momento, «ya que nuestro equipo de investigación aún está investigando este incidente».
El informe señaló que Amnistía no es conocida por mostrar tanta paciencia a la hora de acusar a Israel de crímenes de guerra basándose en informes de la organización terrorista Hamás u otras fuentes poco fiables. En marzo de 2025, Amnistía declaró que «los ataques israelíes contra profesionales sanitarios deben investigarse como crímenes de guerra».
Human Rights Watch y muchas otras organizaciones de derechos humanos conocidas por su incesante crítica a los presuntos crímenes de guerra israelíes no respondieron a las solicitudes de comentarios sobre el ataque a Soroka.
En cambio, el ministro británico para Oriente Medio y el Norte de África, Hamish Falconer, sí condenó el ataque a Soroka, escribiendo en X: «Mis condolencias están con las víctimas y sus seres queridos tras el terrible ataque iraní contra un hospital en Beer Sheva. Los hospitales nunca deben ser objeto de ataques».
Fuente: ArutzSheva- Traducido por UnidosxIsrael
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