Las autoridades abren una investigación después de que un lugar de culto fuera profanado con símbolos de odio y antisemitismo.
El vandalismo antisemita ha vuelto a golpear a Australia, ya que el viernes por la mañana se descubrieron esvásticas pintadas con aerosol en la sinagoga Allawah, en el sur de Sídney. Las fuerzas del orden han iniciado de inmediato una investigación para identificar y detener a los responsables del delito de odio.
El primer ministro de Nueva Gales del Sur, Christopher Minns, condenó enérgicamente el acto, calificándolo de «horrible y terrible». Caracterizó a los perpetradores como individuos «que buscan dividir nuestra sociedad». El primer ministro Anthony Albanese se hizo eco de estos sentimientos, subrayando que «no hay lugar para este tipo de actos en la multicultural Australia».
En una conversación matutina con Minns, el presidente de la sinagoga expresó su profunda consternación y destacó que este acto de odio contrasta marcadamente con los valores de la comunidad local. Los líderes de la comunidad judía han pedido detenciones aceleradas y medidas de aplicación más estrictas contra los delitos de odio.
El último incidente se suma a un patrón preocupante de actos antisemitas en toda Australia, incluido el ataque incendiario de diciembre en la sinagoga Ades Israel en Melbourne y el vandalismo de vehículos en el este de Sydney esta semana. Los líderes de la comunidad judía siguen dando la voz de alarma sobre la creciente frecuencia de incidentes antisemitas y abogan por una legislación más estricta que aborde la incitación y los delitos de odio.
Fuente: IsraelHayom- Traducido por UnidosxIsrael
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