El Ministerio de Salud afirma haber solicitado a la Cruz Roja que garantice que los rehenes no sean sobrealimentados repentinamente por sus captores, ya que esto puede causar problemas médicos. Equipos forenses se preparan para recibir los cuerpos de los cautivos asesinados.
La Dra. Noya Shilo, directora del Centro de Retorno a la Vida del Centro Médico Sheba, camina con dos rehenes liberados de su cautiverio en Gaza en febrero de 2024. (Cortesía/Centro Médico Sheba)
Antes de que el Centro Médico Sheba recibiera a los 46 rehenes liberados del cautiverio de Hamás en noviembre de 2023 y principios de 2024, el Dr. Noya Shilo, director del Centro de Retorno a la Vida del hospital para rehenes y sus familias, afirmó que no existía un protocolo y que la literatura médica tenía pocas directrices sobre cómo manejar esta situación.
Sin embargo, el jueves, un portavoz de Sheba declaró que el hospital se encuentra en los últimos preparativos para recibir a algunos de los aproximadamente 20 rehenes vivos que regresan del cautiverio de Hamás.
En su comunicado, el Ministerio de Salud también indicó que el sistema de salud ha emitido directrices específicas para los hospitales designados, adaptando el protocolo al estado de salud previsto de los rehenes tras más de 734 días de cautiverio.
Los preparativos, dirigidos por la Dra. Hagar Mizrahi, jefa de la División Médica del ministerio, se basan en las lecciones aprendidas de liberaciones y operaciones de rescate anteriores.
Además de Sheba, el Centro Médico Tel Aviv Sourasky (Ichilov) y el Centro Médico Beilinson en Petah Tikva han sido designados como centros médicos que recibirán a los rehenes repatriados. En caso de requerir atención médica urgente, los rehenes liberados podrán ser trasladados al Centro Médico Universitario Soroka en Beersheba o al Centro Médico Barzilai en Ascalón, que se encuentran más cerca de Gaza.
El Centro Nacional de Medicina Forense (Abu Kabir) está ultimando los preparativos para recibir los cuerpos de los rehenes caídos, como lo ha hecho en casos anteriores, donde confirmará sus identidades.
Síndrome de Realimentación
El Ministerio de Salud informó que hace varias semanas contactó con la Cruz Roja para solicitar que los rehenes, que se cree que sufrieron inanición durante su cautiverio, no sean sobrealimentados antes de su regreso, como podría hacer Hamás para intentar ocultar su estado de demacración.
Según el ministerio, tras una inanición prolongada, un aumento repentino en la ingesta de alimentos puede provocar el llamado síndrome de realimentación, que puede causar complicaciones neurológicas, respiratorias y cardíacas.
Ninguno de los rehenes ha sido visitado por funcionarios de la Cruz Roja durante el tiempo que han permanecido cautivos en Gaza.
Evyatar David, rehén de Hamás, fue filmado cavando lo que teme que sea su propia tumba en un túnel en Gaza, en un video de propaganda de Hamás que su familia autorizó para su publicación el 2 de agosto de 2025.
El Ministerio de Salud también indicó que ha ordenado a los hospitales que atiendan a los repatriados en un área hospitalaria separada, separada de otros pacientes, incluyendo la sala de urgencias.
Cada repatriado será tratado en una habitación privada, junto con sus familiares u otras personas de confianza. El área debe incluir un espacio compartido general para reuniones y áreas privadas separadas para descanso y reuniones familiares, indicó el ministerio.
Dada la larga duración del cautiverio, el ministerio enfatizó la necesidad de revisar cuidadosamente y profundizar en el conocimiento del historial médico de cada persona, incluyendo las complicaciones derivadas de la falta de tratamiento durante su cautiverio.
Se realizará un examen médico preliminar inmediatamente después de la llegada para descartar cualquier afección urgente.
De ser posible, este examen debe realizarse en presencia de un familiar o acompañante de confianza, indicó el ministerio.
Posteriormente, tras la reunificación familiar, se realizará un examen de seguimiento en coordinación con las autoridades de seguridad para completar la evaluación médica completa.
Cada persona que regrese será examinada por una enfermera y un especialista en medicina de emergencia y, según sea necesario, por especialistas en otras áreas relevantes.
Los hospitales también deben recibir información sobre la atención médica y la ingesta de alimentos proporcionada inmediatamente después de la llegada de las personas que regresan a Israel. El ministerio enfatizó que los hospitales deben consultar con especialistas médicos de alto nivel antes de tomar decisiones sobre el tratamiento.
Durante la hospitalización, el ministerio recomendó la creación de un equipo de apoyo multidisciplinario estable que incluya un médico tratante, médicos consultores, una enfermera, un trabajador social, un psiquiatra, un psicólogo, un dietista y un médico forense.
Este equipo mantendrá conversaciones conjuntas según sea necesario para elaborar un plan de tratamiento integral y personalizado.
En el Hospital Beilinson, el Dr. Michal Steinman, director de enfermería, afirmó que la preparación del personal para recibir a nueve rehenes en febrero de 2024 fue una auténtica «labor detectivesca».
«Examinamos sistema por sistema: oídos, ojos, boca, cabello, piel, riñones, orina, lo que sea, músculos, para comprender qué le sucede a una persona en esas condiciones de cautiverio», explicó Steinman.
En los hospitales, el ministerio indicó que se realizará una evaluación psiquiátrica dentro de las 24 horas posteriores al ingreso. Cualquier síntoma mental inusual se examinará junto con el médico tratante para descartar causas físicas que se presenten como angustia psicológica.
Un psiquiatra dirigirá luego la gestión de la salud mental, incluyendo la observación, la orientación para el equipo médico, la atención sensible al trauma, la coordinación con los funcionarios de seguridad y el apoyo al repatriado y a su familia.
Imagen de un video publicado por el brazo armado de Hamás que muestra a los rehenes Yocheved Lifshitz (izquierda) y Nurit Cooper antes de su liberación, el 23 de octubre de 2023. (Captura de pantalla)
Un dietista orientará a las familias sobre los riesgos del síndrome de realimentación, realizará una evaluación nutricional completa que incluye antecedentes, análisis de sangre, peso y altura, para definir las necesidades de los exrehenes y desarrollará un plan de nutrición diario ajustado según su evolución clínica.
Garantizando una transición estable tras el cautiverio
Tras la evaluación y el tratamiento, el personal del hospital decidirá si es necesaria una mayor hospitalización o si se le da de alta al repatriado para que reciba atención diaria continua.
El ministerio recomendó que el repatriado y su familia permanezcan en el hospital durante al menos cuatro días en el área de tratamiento específica para garantizar una transición estable.
«El regreso del cautiverio requiere evaluación médica y tratamiento inmediatos en el hospital, seguidos de atención física, mental y social a largo plazo y seguimiento tras el alta», escribió el ministerio. «La respuesta debe ser integral, continua y personalizada, manteniendo una estricta privacidad».
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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