El Ministerio de Finanzas de Israel ha saldado con éxito una deuda de electricidad de 1.100 millones de shekels que tenía con la Autoridad Palestina desde hacía una década, al tiempo que reutilizaba fondos del fondo noruego destinado a Gaza.
El Ministerio de Finanzas ha compensado todas las deudas de electricidad de la Autoridad Palestina (1.100 millones de shéquels, 310 millones de dólares) y, al mismo tiempo, ha vaciado el fondo noruego donde se habían depositado los fondos destinados a la Autoridad Palestina desde el comienzo de la guerra.
El Ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, lideró esta iniciativa durante el año pasado y el domingo informó al Gabinete Diplomático y de Seguridad sobre la finalización del proceso, cobrando toda la deuda que ascendía a 1.900 millones de shéquels (515 millones de dólares) desde hacía más de una década.
Además, y no menos importante, el Ministerio de Finanzas emitió el domingo una orden al fondo noruego, donde Israel había depositado millones de dólares deducidos de los fondos de la AP destinados a la Franja de Gaza (275 millones de shekels mensuales o 74 millones de dólares), lo que suma un total de unos 1.400 millones de shekels acumulados hasta mayo (379 millones de dólares). Este dinero cubrirá las deudas de la AP con las empresas israelíes: la mitad irá a las empresas que suministraban combustible a la Autoridad Palestina y la otra mitad a la Corporación Eléctrica de Israel.
Desde el pasado mes de mayo, cuando Noruega anunció su reconocimiento unilateral de un Estado palestino, el ministro Smotrich también dejó de transferir los fondos de compensación al fondo noruego y comenzó a acumular la cantidad por separado en Israel. Ahora, la suma que supuestamente debía regresar a la AP después de la guerra tanto del fondo como de Israel se está transfiriendo para cubrir las deudas con la Corporación Eléctrica de Israel en coordinación con los EE.UU. Las negociaciones entre bastidores sobre este asunto con la AP y varias entidades estadounidenses fueron dirigidas por el subdirector general del Ministerio de Finanzas. Este último tuvo éxito donde sus predecesores fracasaron: transfirió el dinero en su totalidad, sin reducir los intereses de demora, de los fondos de la AP a la Corporación Eléctrica de Israel.
La deuda de la AP con la Corporación Eléctrica de Israel ha sido un problema constante para Israel durante 15 años. El ex director general del Ministerio de Finanzas, Shai Babad, llegó a dos acuerdos en 2016 y 2020 con la AP para liquidar la deuda renovable, pero la Autoridad los violó repetidamente.
Como informamos en septiembre de 2023, Smotrich, en su papel de ministro de Finanzas, comenzó a reducir la deuda renovable asociando la Compañía de Electricidad del Distrito de Jerusalén con la AP, evitando así que la deuda creciera cada dos meses y fijándola en 1.900 millones de shéquels. Desde entonces, en julio y noviembre del año pasado, se recaudaron de la Autoridad un total de aproximadamente 700 millones de shéquels.
Hoy, este histórico proceso de recaudación llegó a su punto culminante y a su conclusión: 1.100 millones de shéquels serán liquidados en su totalidad y el dinero será transferido a la Corporación Eléctrica de Israel, en parte desde el fondo noruego y en parte desde los fondos acumulados en Israel. Después de llegar a acuerdos con el embajador de EE.UU., Thomas Nides, y de impedir el uso de los fondos acumulados en el fondo noruego para fines palestinos, Noruega recibirá una carta del Contador General solicitando los fondos, desde allí para pagar diversas deudas. A pesar de las exigencias estadounidenses de descuentos en los tipos de interés, el Ministerio de Finanzas se negó a ceder ni un solo shéquel, entendiendo que tales «descuentos» son un incentivo negativo que ningún ciudadano israelí recibe.
Por primera vez, se ha fijado un plazo con los estadounidenses: transferir el presupuesto a Israel sin cargar indirectamente a los ciudadanos con la deuda de la Corporación Eléctrica de Israel. El hecho de que la administración Biden boicoteara al ministro de Finanzas israelí jugó a favor, ya que la ausencia de relaciones significaba la ausencia de obligación de responder a sus demandas sobre las cuestiones palestinas.
La ganancia diplomática significa que la Autoridad Palestina se vio indirectamente obligada a pagar la deuda que había ido renovando año tras año. Este es también un acontecimiento económico importante, ya que la deuda de la AP con la Corporación Eléctrica de Israel dio lugar a préstamos y tipos de interés elevados, así como a un daño a la calificación crediticia de la Corporación Eléctrica de Israel, que en última instancia se renovó a los ciudadanos.
Fuente: IsraelHayom- Traducido por UnidosxIsrael
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