Entre palmas y ramas de olivo, Jerusalén dio inicio a la Semana Santa con la celebración de las ceremonias religiosas del Domingo de Ramos.
Decenas de personas agitaron palmas y ramas de olivo en Jerusalén como parte de los actos religiosos de conmemoración del Domingo de Ramos. Todos celebraron la entrada de Jesús a este terriorio en medio de la que es considerada como la procesión con la que se da inicio a la Semana Santa.
Con un recorrido que comenzó en el Monte de los Olivos, los asistentes entraron a Jerusalén, la llamada «Ciudad Santa». Asistentes de distintas nacionalidades calificaron el emotivo encuentro como un «privilegio».
Desde países como Colombia y México, algunos peregrinos expresaron la satisfacción que les produjo visitar el emblemático sitio en el que «todo empezó».
Fuente: france24