Muchos residentes ya han abandonado los pueblos adyacentes a la frontera norte; El Ministerio de Defensa dice que los residentes serán trasladados a pensiones financiadas por el Estado
Las Fuerzas de Defensa de Israel y el Ministerio de Defensa anunciaron el lunes que planeaban evacuar a los civiles que viven en ciudades hasta dos kilómetros (1,25 millas) de la frontera libanesa en medio de repetidos ataques con cohetes y misiles por parte de Hezbolá y facciones palestinas aliadas en los últimos días.
La Autoridad Nacional de Gestión de Emergencias (NEMA) del ministerio dijo que los residentes serían llevados a casas de huéspedes financiadas por el estado.
Las FDI dijeron que notificaron a los jefes de las autoridades locales en el área sobre la próxima implementación del plan.
Según las FDI y el Ministerio de Defensa, las 28 comunidades incluidas en el plan eran: Ghajar, Dishon, Kfar Yuval, Margaliot, Metula, Avivim, Dovev, Ma’ayan Baruch, Bar’am, Manara, Yiftah, Malkia, Misgav Am, Yir’on, Dafna, Arab al-Aramshe, Shlomi, Netu’a, Ya’ara, Shtula, Matat, Zar’it, Shomera, Betzet, Adamit, Rosh Hanikra, Hanita y Kfar Giladi.
Muchos residentes de las ciudades fronterizas del norte ya habían evacuado hacia el sur en medio de la escalada de ataques desde el Líbano.
El portavoz de las FDI, el contralmirante Daniel Hagari, dijo el lunes que Hezbollah enfrentaría una respuesta “mortal” si continuaba llevando a cabo ataques contra Israel.
«Hezbollah llevó a cabo una serie de ataques ayer para tratar de desviar nuestros esfuerzos operativos [lejos de la Franja de Gaza], bajo la dirección y el respaldo de Irán, poniendo en peligro al Estado del Líbano y a sus ciudadanos», dijo Hagari en una conferencia de prensa.
«Hemos aumentado nuestras fuerzas en la frontera norte y responderemos agresivamente a cualquier actividad contra nosotros», dijo. “Si Hezbollah se atreve a ponernos a prueba, la reacción será mortal. Estados Unidos nos está brindando todo su respaldo”.
El domingo, el grupo terrorista Hezbollah lanzó seis misiles guiados antitanque contra una ciudad israelí y posiciones militares en la frontera con el Líbano, matando a un civil y un soldado.
También se lanzaron otros nueve cohetes desde el Líbano contra ciudades del norte, sin causar daños ni heridos. Posteriormente, el grupo terrorista Hamás, con sede en Gaza, se atribuyó la responsabilidad de los ataques con cohetes.
Las FDI dijeron que bombardearon las fuentes de lanzamiento de misiles y cohetes con artillería y llevaron a cabo una serie de ataques aéreos contra sitios pertenecientes a Hezbolá.
El domingo, las FDI también anunciaron que estaban restringiendo el área de hasta cuatro kilómetros de la frontera con el Líbano, ordenando a los civiles que no entraran.
El viernes, las FDI declararon algunas zonas de la ciudad fronteriza de Metula zona militar cerrada. Metula había recomendado en los últimos días a los vecinos abandonar la localidad en medio de las tensiones.
Israel ha intercambiado disparos con Hezbolá y facciones palestinas aliadas en el Líbano varias veces en los últimos días, aunque los ataques de ojo por ojo han seguido teniendo un alcance limitado.
En total, al menos cinco soldados israelíes, cuatro terroristas de Hezbolá y cinco terroristas palestinos han muerto en los intercambios. Un civil israelí murió en el ataque de Hezbollah el domingo, y también se informó que dos civiles libaneses y un periodista murieron por bombardeos israelíes.
Hezbollah ha disparado varios misiles guiados antitanques, cohetes y morteros contra posiciones militares israelíes en los últimos días, mientras que grupos palestinos como Hamás y la Jihad Islámica han lanzado cohetes y enviado hombres armados para infiltrarse en Israel.
Las FDI han reforzado sus fuerzas en el norte de Israel en medio de temores de que el grupo terrorista Hezbollah, con sede en el Líbano, abra un segundo frente en la guerra desencadenada por el ataque sin precedentes de Hamas el fin de semana pasado desde la Franja de Gaza.
La guerra estalló después de la masacre de Hamás del 7 de octubre, en la que más de 1.500 terroristas irrumpieron a través de la frontera con Israel desde la Franja de Gaza por tierra, aire y mar, matando a más de 1.300 personas y tomando entre 150 y 200 rehenes de todas las edades al amparo de un diluvio. de miles de cohetes disparados contra pueblos y ciudades israelíes. La gran mayoría de los muertos mientras los hombres armados arrasaban las comunidades fronterizas eran civiles: hombres, mujeres, niños y ancianos.
Los residentes de comunidades cercanas a la frontera con Gaza también han sido evacuados en medio de los combates.
Con niveles de alerta altos, Hezbollah dijo el viernes que estaría “totalmente preparado” para unirse a su aliado palestino Hamas en la guerra contra Israel cuando llegue el momento adecuado.
Irán también ha amenazado con una confrontación más amplia.
Estados Unidos ha enviado un segundo grupo de ataque de portaaviones, el USS Dwight D. Eisenhower, al Mediterráneo oriental, donde, según el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, se unirá al grupo de ataque de portaaviones Gerald R. Ford «como parte de nuestro esfuerzo para disuadir acciones hostiles contra Israel o cualquier esfuerzo para ampliar esta guerra tras el ataque de Hamás a Israel”.
Israel ha tomado represalias por el ataque sin precedentes de Hamás atacando los objetivos del grupo terrorista en la Franja de Gaza, diciendo que su objetivo es destruir a Hamás y que atacará cualquier lugar donde opere Hamás. Este fin de semana instó a los civiles a evacuar la zona del norte de Gaza. Unas 2.600 personas han muerto en los ataques contra Gaza, según el Ministerio de Salud dirigido por Hamás. Las FDI también dijeron que habían matado a unos 1.500 terroristas dentro de Israel.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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