«Afirmaron haber transferido a la familia a otro grupo, jugando con sus vidas como peones. Los rehenes, al ser liberados, quedan traumatizados»
Más de dos meses después del ataque del 7 de octubre por parte de Hamás en el sur de Israel, 129 rehenes, incluida la familia Bibas, siguen en cautiverio en Gaza.
Entre los cautivos se encuentran Shiri, su esposo Yarden, su hijo Arel de cuatro años y el bebé Kfir de 11 meses, cuya angustiosa historia se ha convertido en un símbolo de la crisis actual.
Yosi Schneider, primo de Shiri Bibas, habló con i24NEWS el miércoles y arrojó luz sobre la pesadilla de la familia.
«Kfir acaba de cumplir 11 meses ayer», relató Schneider. «Ha pasado su vida bajo tierra durante casi tres meses. No es sólo el peligro inmediato que representa Hamás, sino la grave preocupación por su salud y bienestar».
La falta de acceso a ayuda para los rehenes, en particular atención médica para el bebé, ha generado serias preocupaciones.
Terroristas de Hamás secuestran a la familia Bibas
Schneider expresó su frustración por el hecho de que la Cruz Roja no haya podido llegar hasta los cautivos. «Su afirmación de que no habrá acceso a los rehenes es falsa. Es hipócrita», afirmó, destacando la necesidad urgente de una atención adecuada, especialmente para el desarrollo de Kfir.
Al describir la guerra psicológica empleada por Hamás, Schneider detalló las tácticas traumáticas utilizadas. «Afirmaron trasladar a la familia a otro grupo, jugando con sus vidas como peones. Los rehenes, al ser liberados, quedan traumatizados», lamentó. «Es evidente en sus ojos; han soportado un inmenso tormento psicológico».
Cuando se le preguntó sobre la respuesta internacional, Schneider enfatizó la necesidad de acciones concretas. «Si bien algunos líderes expresan su apoyo, la acción es primordial», subrayó.
«Muchos países tienen conexiones con Hamás o los financian indirectamente. Para combatir esto, deberían cortar estos vínculos y tomar medidas concretas».
Shiri Bibas Cortesía de la familia
Schneider habló de la unidad y el apoyo dentro de Israel, donde las manifestaciones y los gestos simbólicos, como la liberación de globos naranjas que representan el cabello de los niños, se han convertido en un llamamiento para el regreso seguro de los cautivos.
«El mundo debe actuar ahora para impedir que tales horrores ocurran en otros lugares», instó Schneider. «El silencio es ensordecedor y hace tiempo que es necesario actuar».
Fuente: i24News- Traducido por UnidosxIsrael
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