El primer ministro se reúne con los familiares de los rehenes en medio de la ofensiva estadounidense para asegurar nuevas conversaciones a pesar de los desacuerdos entre Israel y Hamás
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó el martes a El Cairo y continuará hasta Doha, donde intentará persuadir a los intermediarios para que ejerzan más presión sobre Hamás para que continúe las conversaciones para una liberación de rehenes y un acuerdo de alto el fuego tras la aceptación por parte del primer ministro Benjamin Netanyahu de la propuesta estadounidense.
Netanyahu se reunió el martes con familiares de los fallecidos y de los rehenes y, según se informa, les dijo que «no es seguro que haya un acuerdo».
Se espera que los estadounidenses celebren una cumbre para seguir negociando el viernes y posiblemente el jueves, pero no está claro si Hamás aceptará asistir. Se estima que Hamás podría esperar a que se produzca una escalada y un ataque de represalia de Hezbolá contra Israel.
Blinken empleó una táctica interesante: se acercó a Netanyahu y dijo que aceptaba la propuesta de mediación estadounidense, a pesar de las lagunas existentes, incluidas las cuestiones relacionadas con Netzarim y el Corredor de Filadelfia.
Esta medida pone la pelota en el campo de Hamás. Algunos en Israel se sorprendieron por este abrazo y la declaración de Blinken, creyendo que los estadounidenses estaban tratando de tenderle una trampa a Netanyahu. Esta es esencialmente su forma de decirle: «Intenta decir que no o descarrilar esto ahora», dicen algunos observadores.
Hamás criticó duramente a Blinken y al presidente estadounidense Joe Biden después de sus palabras. «Seguimos las declaraciones de Biden con gran asombro y profundo desacuerdo, donde afirmó que la organización se echó atrás en un acuerdo de alto el fuego», dijo Hamás en un comunicado oficial.
«Afirmamos que las palabras de Biden y Blinken son acusaciones engañosas que no reflejan nuestra verdadera posición, que busca lograr el fin de la guerra», agregó el comunicado.
Hamás también agregó: «Las declaraciones de Biden y Blinken son parte del sesgo estadounidense a favor de la ocupación sionista y la participación en la agresión y la guerra de aniquilación. Vemos estas declaraciones como una luz verde estadounidense para que el gobierno sionista extremista cometa más crímenes contra civiles. Lo que se nos presentó recientemente es una reversión de lo que las partes acordaron el 2 de julio, que se basó en la propia declaración de Biden».
El Foro Heroísmo, que reúne a las familias de los soldados muertos durante la guerra de Gaza, se reunió con Netanyahu el martes. «Entendimos por lo que dijo el primer ministro que un alto el fuego, en caso de que se produzca, será limitado», dijeron representantes del foro después de la reunión.
«No renunciará al Corredor de Filadelfia; no se habló de reducir las fuerzas de la Franja de Gaza. Según el primer ministro, Israel se mantiene firme en todas sus demandas y el primer ministro no cede ante ninguna presión de Estados Unidos”, añadió el Foro.
La propuesta estadounidense de establecer un puente detalla las líneas generales de la liberación de rehenes, dando prioridad a la liberación de mujeres y soldados de las FDI durante las fases iniciales. El plan se centrará en la liberación de rehenes vivos como prioridad. Israel insiste en aumentar el número de rehenes vivos que serán liberados en el marco del acuerdo, y los estadounidenses han abordado este tema en su propuesta.
La propuesta también detalla la lista de prisioneros palestinos que serán liberados de las cárceles israelíes, incluidos 47 prisioneros que fueron liberados previamente en el acuerdo Gilad Shalit pero que luego fueron encarcelados nuevamente. Israel tendrá poder de veto sobre la identidad de 65 de los 150 prisioneros que cumplen sentencias de cadena perpetua.
El acuerdo también especifica un cambio en el despliegue de las Fuerzas de Defensa de Israel en Gaza durante el alto el fuego de seis semanas. Además, la propuesta describe el inicio de las negociaciones para la segunda fase del acuerdo, un punto de discordia entre Israel y Hamás.
El principal desacuerdo ahora se centra en el Corredor de Filadelfia. La propuesta exige una reducción de las fuerzas de las Fuerzas de Defensa de Israel en el área, pero no ordena una retirada completa.
Fuente: Ynet- Traducido por UnidosxIsrael
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