El enviado de España es citado para una amonestación; la primer ministro italiana, Meloni, califica de «injustificable» el bloqueo de Gaza, y el ministro alemán, Merz, insiste en que «hay que evitar la hambruna» y alcanzar un alto el fuego.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, calificó a Israel de «Estado genocida» durante su intervención en el Congreso de los Diputados el miércoles, afirmando que Madrid «no hace negocios» con ese país.
Los comentarios provocaron la indignación en Israel, y el Ministerio de Asuntos Exteriores convocó al embajador español en Israel para una reprimenda.
«Tras las duras declaraciones del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, el embajador español en Israel ha sido convocado mañana a una reunión de amonestación en el Ministerio de Asuntos Exteriores en Jerusalén», declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Según medios de comunicación españoles, esta era la primera vez que Sánchez calificaba a Israel de «genocida», un término que los partidos de extrema izquierda del país utilizan con frecuencia para referirse al Estado judío por sus acciones durante la guerra de Gaza, y que Israel rechaza categóricamente.
España critica desde hace tiempo las políticas de Israel hacia los palestinos en Gaza y Cisjordania, y ha indignado a Jerusalén al reconocer el Estado palestino en mayo pasado, al igual que Noruega e Irlanda.
El gobierno de Sánchez canceló recientemente un contrato para comprar municiones para su fuerza policial a una empresa israelí, cediendo a la presión de su socio de coalición de extrema izquierda, Sumar, después de que este amenazara con abandonar el gobierno.
El gobierno de Sánchez se comprometió a dejar de vender armas a Israel poco después del 7 de octubre de 2023, cuando miles de terroristas liderados por Hamás irrumpieron en el sur de Israel, asesinando a unas 1.200 personas y tomando 251 rehenes, lo que desencadenó la guerra en Gaza. Desde entonces, más de 52.000 personas han muerto en la Franja, según el recuento no verificable del Ministerio de Salud de Hamás, que no distingue entre civiles y combatientes.
El año pasado, el gobierno español amplió ese compromiso para incluir la compra de armas a Israel.
La continua ofensiva israelí en Gaza y el continuo bloqueo de la ayuda han generado una creciente oposición, incluso de países que han apoyado ampliamente a Israel tras la masacre de Hamás del 7 de octubre, que desencadenó la guerra.
También el miércoles, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, declaró durante una sesión parlamentaria que la situación humanitaria en Gaza es «cada vez más dramática e injustificable», subrayando que ha instado repetidamente a Israel a encontrar una solución para el conflicto.
“Es una petición que renuevo hoy ante la situación humanitaria en Gaza, que no me cuesta definir como cada vez más dramática e injustificable”, declaró Meloni.
El gobierno de derecha de Italia, aunque mucho menos hostil que el de España, se ha mostrado cada vez más firme contra las acciones de Israel en Gaza durante la guerra y ha pedido repetidamente un alto el fuego, un acuerdo para la liberación de rehenes y el fin del bloqueo israelí a la Franja.
Gaza no ha recibido ayuda en más de dos meses debido al bloqueo israelí, lo que ha provocado una grave situación humanitaria, según organizaciones humanitarias sobre el terreno.
El canciller alemán, Friedrich Merz, también emitió un comunicado sobre Gaza el miércoles, instando a todas las partes a evitar una hambruna en el enclave.
Si bien las autoridades israelíes han negado que haya hambruna en Gaza, un informe reciente indica que algunos oficiales del ejército israelí han concluido que Gaza podría enfrentarse a una hambruna generalizada si no se restablece el suministro de ayuda alimentaria en las próximas semanas, citando a tres funcionarios de defensa israelíes familiarizados con la situación en la Franja.
En un tono diferente al de sus homólogos español e italiano, Merz afirmó que Alemania apoya a Israel, pero enfatizó que «esperamos que se realicen más esfuerzos para brindar asistencia humanitaria a la población de Gaza, cuyo sufrimiento vemos, especialmente entre niños, mujeres y ancianos».
«Es una obligación humanitaria de todas las partes, y recalco que todas las partes deben evitar la hambruna en la región lo antes posible», declaró Merz.
Merz también expresó su esperanza de que se lleven a cabo negociaciones exitosas para un alto el fuego y la liberación de los rehenes que Hamás aún mantiene en su poder, incluyendo a aquellos de nacionalidad alemana, y afirmó que Israel debería ajustar sus acciones militares para garantizar que todos los cautivos que aún siguen vivos puedan regresar a casa con vida.
Alemania, que desde hace tiempo ha buscado expiar el Holocausto, ha sido un firme defensor de Israel, con quien celebró esta semana 60 años de relaciones diplomáticas.
Al preguntársele si Alemania implementaría una orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional contra el primer ministro Benjamin Netanyahu, Merz respondió que, en principio, debería ser posible que un primer ministro israelí visite Alemania.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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