La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios afirma que la propuesta «contraviene los principios humanitarios fundamentales» y parece estar destinada a utilizar suministros vitales como «táctica de presión».
La agencia de la ONU responsable de coordinar la entrada de ayuda humanitaria a Gaza emitió un comunicado formal el domingo en el que rechaza el plan israelí de reformar el sistema de entrada de ayuda a la Franja, alegando que «contraviene los principios humanitarios fundamentales».
La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios indicó que, en consecuencia, no cooperaría con Israel en la implementación del programa propuesto.
El plan israelí, del que The Times of Israel informó por primera vez el viernes, implicaría que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dejaran de distribuir y almacenar la ayuda al por mayor y, en su lugar, que organizaciones internacionales y contratistas de seguridad privada distribuyeran cajas de alimentos a familias gazatíes individuales.
Según funcionarios israelíes y árabes familiarizados con el asunto, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) no participarían directamente en la distribución de la ayuda, pero las tropas se encargarían de proporcionar un refuerzo de seguridad a los contratistas privados y las organizaciones internacionales que la distribuyen. Israel cree que este método dificultará que Hamás desvíe la ayuda a sus combatientes, según los funcionarios.
Israel dejó de permitir la entrada de ayuda a Gaza el 2 de marzo, tras finalizar la primera fase del acuerdo de alto el fuego y liberación de rehenes. Jerusalén argumentó que Hamás desvió gran parte de la ayuda que entró durante la tregua de seis semanas, pero que los 650 camiones diarios eran suficientes para alimentar a la población durante un período prolongado.
La OCHA, cuyo portavoz ya desestimó el plan israelí en declaraciones a The Associated Press el sábado, emitió un comunicado oficial que amplía su oposición a la propuesta.
“Las autoridades israelíes han intentado cerrar el sistema actual de distribución de ayuda, gestionado por las Naciones Unidas y sus socios humanitarios, y obligarnos a entregar suministros a través de centros israelíes bajo las condiciones establecidas por el ejército israelí, una vez que el gobierno acceda a reabrir los cruces fronterizos”, declaró.
“El diseño del plan que se nos ha presentado implicará que gran parte de Gaza, incluyendo a las personas con menor movilidad y más vulnerables, seguirá sin suministros”, continuó. “Contraviesa principios humanitarios fundamentales y parece diseñado para reforzar el control sobre los artículos esenciales como táctica de presión, como parte de una estrategia militar. Es peligroso, ya que obliga a la población civil a desplazarse a zonas militarizadas para recoger raciones, lo que pone en peligro la vida, incluida la del personal humanitario, a la vez que afianza aún más el desplazamiento forzado.
El Secretario General de la ONU y el Coordinador del Socorro de Emergencia han dejado claro que no participaremos en ningún programa que no se adhiera a los principios humanitarios globales de humanidad, imparcialidad, independencia y neutralidad. En el Territorio Palestino Ocupado, los jefes de todas las entidades de la ONU y las organizaciones no gubernamentales del Equipo Humanitario de País han reafirmado esta postura unánimemente.
Los grupos de ayuda humanitaria afirman que Israel no debería tener ningún papel directo en la distribución de la ayuda una vez que esta llegue a Gaza, y la mayoría afirma que se negará a formar parte de un sistema de este tipo.
Un funcionario del Departamento de Estado criticó la postura adoptada por la ONU y los grupos de ayuda humanitaria en declaraciones al medio Axios.
Afirmó que el programa propuesto era «una solución creativa y original a un problema complejo. Esto es algo que la gente debería celebrar y apoyar, especialmente dadas las necesidades de los gazatíes».
«Da una imagen muy negativa que estos grupos se pongan del mismo lado que el grupo terrorista Hamás en este asunto», declaró el funcionario.
Una fuente involucrada en la instalación del nuevo sistema propuesto por Israel dijo a Axios que sus operaciones no serían controladas por las Fuerzas de Defensa de Israel.
“Creemos que se debe actuar con urgencia”, declaró la fuente, señalando que el objetivo es encontrar una solución que “se adhiera a los principios humanitarios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia”.
Israel no ha detallado públicamente ni puesto por escrito ninguna de sus propuestas. Sin embargo, los grupos de ayuda humanitaria han estado documentando sus conversaciones con funcionarios israelíes, y The Associated Press obtuvo más de 40 páginas de notas que resumen las propuestas de Israel y las preocupaciones de los grupos de ayuda humanitaria al respecto.
No hay un plazo exacto para la entrada en funcionamiento del nuevo sistema, pero las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) creen que solo les quedan unas semanas antes de una grave crisis humanitaria, según declaró un funcionario israelí al Times of Israel la semana pasada.
El domingo por la noche, el gabinete de seguridad israelí de alto nivel aprobó el plan renovado de entrega de ayuda.
El ministro de Seguridad Nacional, de extrema derecha, Itamar Ben Gvir, fue el único miembro que votó en contra del plan, que se implementará cuando la situación en Gaza lo requiera.
El gabinete también aprobó por unanimidad un plan para ampliar la ofensiva militar en la Franja de Gaza, según confirmó un funcionario israelí a The Times of Israel.
Se espera que este plan se implemente únicamente tras la visita del presidente estadounidense Donald Trump a la región la próxima semana, y hasta entonces, se trabajará para alcanzar un acuerdo con Hamás sobre un alto el fuego y un acuerdo sobre la toma de rehenes, según informaron medios hebreos.
La guerra en Gaza se desencadenó tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, cuando unos 5.600 terroristas irrumpieron en la frontera con Israel, mataron a unas 1.200 personas y tomaron 251 rehenes en Gaza, donde decenas de ellos permanecen cautivos.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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