La organización israelí dice que, en lugar de eliminar el material del plan de estudios de 2022, la agencia de refugiados palestinos de la ONU simplemente lo eliminó de su portal de educación pública.
Un organismo de control israelí descubrió que los libros de texto educativos producidos por la agencia de la ONU para los refugiados palestinos continúan incitando a la violencia contra Israel y al odio hacia los judíos, a pesar de las promesas de eliminar dicho contenido.
En cambio, la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas (UNRWA) ha ocultado el material al eliminarlo de su portal educativo público en línea, dijo el Instituto para el Monitoreo de la Paz y la Tolerancia Cultural en la Educación Escolar (IMPACT-se) en un comunicado el jueves.
Según un informe de IMPACT-se, la literatura educativa producida por UNRWA “contiene material que fomenta la yihad, la violencia y el martirio, promueve el antisemitismo y promueve el odio, la intolerancia y la falta de neutralidad”.
“Las falsas teorías de la conspiración enseñan a los estudiantes que las políticas israelíes incluyen intentos de ‘borrar la identidad palestina’, de ‘robar y falsificar la herencia palestina’ y de ‘borrar la herencia cultural de Jerusalén’”, dice el comunicado.
El contenido educativo, que se distribuyó en Cisjordania y Gaza este año, no aparece en el nuevo portal educativo de UNRWA, a pesar de que fue producido por el Departamento de Educación oficial de UNRWA.
“Fueron redactados, supervisados, aprobados, impresos y distribuidos a miles de estudiantes por maestros y personal de UNRWA, cuyos nombres también aparecen en los materiales como contribuyentes o supervisores del contenido”, dijo IMPACT-se.
IMPACT-se señaló que UNRWA afirma que publica todo su material de producción propia en el sitio web en aras de la transparencia.
No hubo comentarios inmediatos de UNRWA sobre el informe.
Portadas del material educativo producido por UNRWA. (IMPACTO-se)
El CEO de IMPACT-se, Marcus Sheff, dijo en el comunicado que UNRWA prometió el año pasado eliminar todo el contenido ofensivo.
“Parece que UNRWA ha interpretado esto como la eliminación del sitio web donde se puede examinar, en lugar de la eliminación de las aulas reales”, dijo Sheff. “UNRWA fue nuevamente consciente de nuestras preocupaciones hace solo dos meses”.
Entre el contenido que IMPACT-se marcó estaba un ejercicio de gramática que enseñaba que “los palestinos sacrifican su sangre para liberar Jerusalén”, decía el comunicado.
Otros ejercicios incluyen oraciones sobre «guerreros de la Jihad» contra «el ocupante», el compromiso de «liberar» Palestina y «resistir al enemigo con valentía», según el informe.
Un poema enseña a los estudiantes que morir como mártir matando israelíes es un “pasatiempo”.
“El poema glorifica el rechazo de un alto el fuego pacífico durante la batalla, presentando la pacificación como un signo de debilidad”, dijo.
El material de educación islámica describe a los judíos como “inherentemente traicioneros y hostiles al Islam y a los musulmanes”, incluido otro ejercicio de gramática que implica que los judíos son impuros y profanan la Mezquita Al-Aqsa en el Monte del Templo en la Ciudad Vieja de Jerusalén.
“Israel se describe como implantado por una conspiración imperialista, europea, colonial y antiárabe con el objetivo de dividir el mundo árabe”, dijo IMPACT-se.
Israel se borra del material de la UNRWA y toda el área del estado judío se etiqueta como la Palestina moderna. A los estudiantes se les dan ejercicios de nombrar ciudades israelíes como palestinas, agregó.
IMPACT-se dijo que su informe muestra que el material de la UNRWA no está a la altura de su afirmación de alinearse con los «valores de la ONU de neutralidad, derechos humanos, tolerancia, igualdad y no discriminación con respecto a la raza, el género, el idioma y la religión».
El grupo dijo que se había reunido con el comisionado general de la UNRWA, Philip Lazzarini, en mayo para plantear sus preocupaciones sobre “los materiales de odio producidos por la UNRWA y el secreto sobre los materiales de enseñanza”.
IMPACT-se también proporcionó a Lazzarini una copia de su informe antes de su publicación.
Aunque Lazzarini ha dicho que existen «mecanismos internos robustos» para garantizar que el contenido coincida con los valores de la ONU, IMPACT-se acusó a la UNRWA de negarse a hacer público el proceso «o revelar documentos clave y los métodos exactos que utiliza para combatir la problemática palestina». plan de estudios.»
IMPACT-se señaló que en junio, la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, planteó el tema del contenido de los libros de texto de UNRWA en una audiencia presupuestaria del Comité de Asignaciones de la Cámara y declaró que era «una línea roja para todos nosotros».
Sheff dijo que la mayoría de los $338 millones que los Estados Unidos financian para la UNRWA se destinan a la educación.
“Seguramente, se puede encontrar la voluntad para hacer cumplir la política, dado que las líneas rojas se están cruzando de manera tan atroz”, instó.
En enero de 2021, un informe similar de IMPACT-se encontró que el material producido por UNRWA estaba “lleno de contenido problemático que contradice los valores declarados de la ONU”.
En una declaración emitida después de la publicación de ese informe, UNWRA prometió nuevamente tomar medidas enérgicas contra la incitación.
El jefe de UNWRA, Lazzarini, dijo en un tuit en ese momento que “no había lugar [para] la incitación al odio/la violencia en las escuelas de UNWRA”. Afirmó que el material incitador había sido publicado por accidente.
Una mujer palestina asiste a una manifestación frente a la sede de la UNRWA en la ciudad de Gaza, el 16 de agosto de 2015.
Israel ha presionado durante mucho tiempo por el cierre de UNRWA, argumentando que ayuda a perpetuar el conflicto con los palestinos, ya que confiere el estatus de refugiado a millones de descendientes de los desplazados originalmente en la época de la Guerra de Independencia de Israel en 1948.
La administración del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, apoyó la postura de Israel recortando la ayuda en 2018. Washington había estado proporcionando a la UNRWA 300 millones de dólares al año, aproximadamente un tercio de su presupuesto anual básico. La administración Biden ha restablecido la financiación.
Ha habido críticas similares a los libros de texto producidos por la Autoridad Palestina.
El Parlamento Europeo aprobó una resolución en 2020 condenando a la Autoridad Palestina por seguir incluyendo discursos de odio y material violento en los materiales escolares, afirmando que “le preocupa que no se haya eliminado material problemático” en los libros de texto escolares palestinos.
Sin embargo, en enero de este año, IMPACT-se descubrió que los libros de texto de PA se han mantenido prácticamente sin cambios.
Los palestinos rechazan el argumento de que sus libros de texto constituyen una incitación. En un discurso ante las Naciones Unidas el año pasado, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, defendió el plan de estudios como una mera expresión de la narrativa nacional palestina.
Fuente: TheTimesofIsrael- Traducido por UnidosxIsrael
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