Omer Shem Tov describió sus 505 días en Gaza, el abuso que sufrió y el momento en que se enteró por Al Jazeera que sería liberado.

Hamás intentó usar a Omer Shem Tov en una trampa terrorista diseñada para matar a soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), reveló el exrehén liberado en una entrevista con el programa Uvda del Canal 12 el jueves por la noche.
En la entrevista, Shem Tov relató cómo los terroristas comenzaron a esparcir lo que, según sus cálculos, eran unos tres millones de shekels en el suelo, antes de ordenarle que volara un edificio sobre el túnel donde lo mantenían cautivo, según dijo. Cuando se negó a participar en la trampa, relató cómo los terroristas amenazaron con dispararle en la cabeza.
«Pues dispárame en la cabeza», respondió Shem Tov.
Los israelíes secuestrados por Hamás el 7 de octubre
El rehén liberado, quien fue secuestrado en el festival Nova Music el 7 de octubre y pasó 505 días cautivo en Gaza, también relató cómo lo dejaron sin comer bajo tierra y le dieron «agua salada».
«Había una buena fiesta, y de repente la música paró. Se oyen disparos y también se ve a gente caer al suelo», describió, refiriéndose al 7 de octubre y a los intentos de Ori Danino por rescatarlo.

Carmel Gat, Eden Yerushalmi, Hersh Goldberg-Polin, Ori Danino, Alexander Lobanov y Almog Sarusi. (Crédito: Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas/Captura de pantalla)
Danino fue uno de los seis rehenes encontrados asesinados en un túnel en Rafah. El joven de 25 años logró escapar de la masacre, pero fue secuestrado cuando regresaba para salvar a más asistentes del festival.
Danino, dijo Shem Tov, «nos repetía una y otra vez: ‘¡Agachen la cabeza, agachen la cabeza!’. Ori realmente nos cuidó».
A pesar de los esfuerzos de Danino, su coche fue capturado y los terroristas rápidamente los apresaron. «Uno de los terroristas lo agarró (a Danino), lo tiró al suelo y le ató las manos. [Luego] se me echó encima, me pisó, me golpeó», y arrojó a Shem Tov delante de las ruedas delanteras del coche.
«Lo único que pasaba por mi mente en ese momento era que me iba a aplastar», explicó Shem Tov, añadiendo que su mente evocaba pensamientos de Gilad Shalit y sus cinco años de cautiverio.
El tiempo de Omer Shem Tov como rehén en Gaza
Desde el momento en que llegó a Gaza, Shem Tov le dijo a Uvda que sabía que tenía que intentar conectar con sus captores. Le preguntó su nombre al terrorista que lo retenía y cantó «Reina de las Rosas» después de que le ordenaran cantar para ellos.
Durante 50 días, Shem Tov estuvo retenido junto a Itay Regev, siendo trasladado de un apartamento a otro. En un momento dado, relató cómo los edificios a su alrededor se tambaleaban como consecuencia de los ataques aéreos de las FDI.
Shem Tov describió su miedo a quedarse solo cuando liberaron a Regev. «De repente, se hizo el silencio en el apartamento, y entonces empezaron las presiones, las preocupaciones, la sensación de soledad. Sentí que me estaba volviendo loco», compartió.
Luego lo trasladaron a un pequeño y estrecho túnel donde pasó 50 días sin luz y solo le daban una galleta al día para comer, una reducción significativa de las dos pitas diarias que recibía al principio de su cautiverio. «El agua durante este periodo», dijo, «era salada».
«Estaba muy, muy delgado. Ya se me veían los huesos», dijo, al hablar del impacto de su prolongada inanición. Finalmente lo llevaron a un túnel más grande, donde pasó 400 días. Sus captores abandonaron los interrogatorios al obsesionarse con los soldados de las FDI que estaban cerca, dijo.
Si bien escapó de los interrogatorios, que otros rehenes liberados han descrito como increíblemente violentos, compartió que los soldados cercanos solo empeoraron la actitud y el trato que los terroristas le daban. Le escupían y lo insultaban, comentó.
Sabiendo que las FDI operaban cerca, Shem Tov fantaseó con escapar, pero su intento se frustró rápidamente en cuanto se le ocurrió la idea.
«Dije: ‘Vale. Las FDI están encima de mí ahora mismo, tengo una oportunidad de escapar. Era de noche, todos dormían», recordó. Miré a mi alrededor para ver si alguien reaccionaba. Nadie reaccionaba. Me puse de pie, con el corazón latiéndole con fuerza. Al acercarse a uno de sus captores, el terrorista sacó una pistola antes de volver a bajarla al suelo.
«Creo que era miedo. Para disuadir», dijo.
A lo largo de más de un año, Shem Tov a veces se enteraba de fragmentos de noticias de Al Jazeera. Fue viendo una transmisión que se enteró de que era uno de los 33 rehenes liberados en un acuerdo de alto el fuego.
Una vez que comenzó el alto el fuego, Shem Tov dijo que Hamás comenzó a darle más comida.
Después de 450 días bajo tierra, finalmente pudo «respirar aire fresco», lo que describió como «el paraíso».
Si bien Shem Tov ahora está libre, admitió sentirse culpable por los demás que quedaron atrás. Te dices a ti mismo: ¿Por qué estoy aquí y ellos no? ¿Y qué pasa con ellos? No entiendo por qué estoy aquí y ellos no. ¿En qué sentido valgo más? Somos iguales. No debería haber una lista. Deberían ser todos y punto.
Shem Tov concluyó afirmando que creía que solo otro acuerdo de alto el fuego traería de vuelta a casa a los 59 rehenes restantes, y que el retraso en el caso de uno de ellos se debía a cuestiones políticas.
Fuente: JPost- Traducido por UnidosxIsrael
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